¿De nuevo?

Leí mi blog desde lo primero que escribí.

Todo.

Al principio me dedicaba a escribir críticas a la sociedad, cómo encontraba que todo está mal, pero que no se puede hacer nada al respecto.

Brígido como afectó las cosas que me acontecieron.

Las críticas a una masa ya no me interesaban por decirlo así.
Me dediqué a hacerlo con las situaciones específicas, pero perdí notoriamente esa frialdad de mente y decisión con la que solía decir las cosas; me fui por las pseudo-cartas a ciertas personas, que claramente iban dirigidas a éstas, pero nunca especifiqué. Hablaba de la cosas que habían pasado, opinaba, mostraba qué tanto y cómo me afectaban, pero nunca las puntualicé.

Creo que dejé de ver las situaciones desde a fuera.

Sigo creyendo que todo es una mierda, y que a veces hay momentos lindos.

Espero volver a lo de antes, me sentía más fuerte.


Un pequeño intento...

Al maricón conchasumadre...
TE ODIO.
Me repugnas.
Los pensamientos más sádicos que jamás había tenido, los tengo hacia ti.
Te deseo lo peor.

A la mosquita muerta...
Já.
Decídete.
No puedes tener todo.
Y si lo quieres todo; qué pena tu vida, conmigo no cuentas.

A la ciega incondicional...
Gracias por estar siempre ahí.
Y sé que las cosas que me dolieron por parte tuya jamás las intencionaste.

A los extras...Díganme las hueás a la cara.
Si se atreven.
Saben perfectamente el miedo que tienen a entablar una conversación al respecto conmigo.
¿Será así sólo por decirlo... porque tengo razón?


Qué relajante.
Si alguien se siente identificado con alguna de las anteriores clasificaciones y cree que no soy capaz de decirlo a la cara, verifique conmigo la información y no tengo problema en tirarle todos los garabatos que me sé en la carita, y saben perfectamente que si eso no lo hago de una es porque prefiero ahorrarles (sí, a ustedes) el mal rato.


Atentamente

Vieja Chubi