2007

2007.
Un año...
El 2 y el 7 están dentro de mis 3 números favoritos, y si los resto, resulta el tercero, así que por ese lado, estéticamente lindo.
Y mi 2007...
Definitivamente mi año más alcohólico.
Más fumador.
Más experimental.
Más amante de la juerga.
Definitivamente el más centrado.
El más cambiante.
Más brígido.
Más adrenalínico.
Más triste.
Más alegre.
Más esclarecedor.


Definitivamente el año en el que he aprendido más.

Vacaciones...

Pff.

Qué no hice.

Pero claro, está bien, eran mis vacaciones de verano, había que aprovecharlas, y la salida del colegio e ida a la playa era la excusa perfecta para destrozarme el hígado. Cosa que al final me costó todo mi poder de expresión en cuanto a mi vida adolescente se refiere, por todo el año. Gracias mamá.

La vuelta al colegio, siempre es lo mismo, aunque de cierta manera todos volvamos distintos.

Del colegio, no me preocupo, nunca lo he hecho y nunca lo haré; estudiar está en contra de mis principios, así que esto del colegio no es un estrés más para mí.
Y ahí de vez en cuando, cuando lograba librarme del factor mamá, me empeñaba en recordar mis etílicos tiempos veraniegos.
Cosa que me llevó recagarme aún más la vida
Mitad de año.
Bueh...
A la mierda todo.
Todo, todo y todos.
No bueno, no hay que exagerar.
Gracias a... quién sea ya que no sé si este señor exista, me di cuenta de la gente que importa.
¡Síiiiiiiiiii!
¡Los demás ya no me importan!
Qué relajante.
En fin, puedo decir que he tenido un fin de año bastante bueno.



2007.
No.
No me quejo, es más creo que me alegro de todo.
Ya que aunque existan los errores.
Creo que ahora puedo decir que no me arrepiento de nada.
Sí, tú, leíste bien, Fe de Errata.
Ahora puedo decir que no me arrepiento, puedo decirte que sí fue un error, y lo admito, pero no me arrepiento... de nada.
Y, ¿por qué?
Bueno, porque finalmente, después de tanto sufrimiento, me encanta mi vida ahora, así que supongo que era algo por lo que tenía que pasar.
Pero, ya sabes, eso no quiere decir que tú no me importes.
Al fin y al cabo, creo que perdiendo a cierta, sólo me gané más a los demás, cosa que creo que es lo mejor que me podría haber pasado.
Así que, gracias a mi misma por ser tan descontralada y cagarla con cuática, ahora me siento extremadamente bien.


Aunque... creo que me gustaría que el 2008 fuese un poco más tranquilo.



Sí, definitivamente el año del que puedo sacar las mejores cosas para aprender a seguir viviendo.


"A fin de cuentas, aprendes a amar, o aprendes a despreciar."
A pesar de mi complejo de pesimista, creo que pude aprender de las dos, aunque una haya sido más inconsciente que la otra.

Sólo eso

"Todo es igual, todo regular, y no me importa la noticia ni lo que pueda pasar.
No veo nada que no pueda realizar, el solo verte a los ojos me hace sentir real.
(...) me hace pensar en los días que me esperan (...) y en las cosas que no llegan cuando esperas de más.
Y luego llegas tú, solamente tú, y te ves tan transparente fuera de lo normal, casi irreal, espectacular y aunque trato de entenderlo no lo puedo asimilar jamás (...) y luego mi mente se pone a volar.
Ay no, no me mires más, ya no me mires más, que todo me da vueltas, todo empieza a rodar en mi cabeza..."
(Millionaire - Plastilina Mosh).

Mierda.
Qué increíble todas las cosas que te pude hacer sentir una sola persona.
Siendo simplemente él.
Inconscientemente.

Todo.

Navidad

Navidad.
Creo que hasta yo misma me esperaba que escribiera algo sobre esto antes.
Pero bueh... No fue no más.
Pero, ahora sí va.

Navidad.
No tengo el más mínimo problema en decir que lo que a mí realmente me interesa, son los regalos.
El sentido de la Navidad se perdió ya hace mucho tiempo.
Se supone que se está celebrando el nacimiento del niño Jesús, creo.
Lo de regalar cosas, no se por qué se empezó, pero asumo que no era más que un simple presente.
Compartir en familia, bueno no es mi principal interés.
Se reunen todos, o casi, y es todo hermosamente maravilloso, y todos se aman y ohh qué felices nos sentimos, somos una familia tan plena y maravillosa.
Bah.
Lo que ocurre esa fecha es que todos actúan como si nada ocurriese, como si todas lo problemas existentes desaparecieran, o sea, en el fondo, todos recurren a un cinismo descarado. Quizá sea por respeto a la fecha que no quieren armar discusiones, pero eso no quiere decir que no sea cínico, más aún si a todos les importa un comino la verdadera razón por la que se está celebrando.

Entonces, eso sería.
La Navidad, es sólo una excusa para recibir regalos.
Porque siendo realistas, creo que muy pocas personas harían la cena y todo eso si tuviesen que abstenerse a los regalos.
Sí.
Regalos.

Ojalá que hayan tenido una muy bonita Navidad, y que Papá Noel les haya llevado todo lo que deseaban.

Tu Reseña

A primera vista, primera impresión; regular. "Piola".
No llamas mucho la atención. Debo decir que a simple vista no te destacas dentro de la multitud.

Un tiempo después, unas cuantas vistas más tarde, la memoria de la gente logra retenerte como alguien bastante... alegre. Aunque no sé si esa es la palabra, pero se acerca bastante.

Luego de la costumbre de relacionarse contigo, tu estrafalaria, quizá hiperactiva personalidad, logra cautivar, logra envolver, logra absorber.

Después.
Después de la las muchas vistas, de la costumbre de ti, después de que te volviste casi necesario, no me queda más remedio que darme cuenta de que el dicho que dice que "uno nunca termina de conocer a las personas" es 100% verdadero y completamente aplicable a tu persona.


Qué decepción.

Las cosas que nunca te diré

Esas cosas que siento dentro de mí.
Que son mi verdadero yo.
Que te adoran.
Que te quieren.
Que te aman.
Que te anhelan.
Que te necesitan.
Que se esconden de ti.
Que te rechazan.
Que prefieren no verte.

Que te necesito lejos.

Todavía

Me gustaría saber que me piensas.
Que me extrañas.
Que me sientes.
Que no has olvidado todo lo que vivimos.
Que fui tan importante para ti como tú lo fuiste para mí.
Que por más grandes que sean las distancias, aún soy alguien para ti.
No una simple persona más en el mundo.
Sino que alguien; como una vez me dijiste que lo era, y aunque sea por el añejo recuerdo de esos tiempos, me sigas considerando así.

Te aclaro, para mí, "recuerdos de tiempos añejos", no son.
Cada instante está activo en mis pensamientos.


Recordando, recreando, sintiendo; anhelando.

Confiésalo, por favor

¿Qué haces tú acá?
¿Qué haces en mi vida?
Interrumpiéndola, llenándola, convirtiéndola, apasionándola, ilusionándola, vaciándola.
¿Cómo es que llegaste?
¿Cómo es que lograste penetrar tan profundamente en ella?
¿Cómo es que te volviste tan indispensable?
Dime en qué momento pasó todo esto.
Dime qué fue lo que hiciste para dejarme entregar así.
Dime cómo lograste ganarte mi plena confianza.
Dime por qué fuiste capaz de todo esto.
Dime qué es lo que tienes que me llevó a mí a esto.

¿Cuándo ocurrió todo?
No sé en qué momento permití que todo esto sucediera, que tú sucedieras.
Dime cuándo.
Dime cómo.
Dime por qué.
Te volviste tan importante.
Pero más que eso...
Confiésame que sabes las respuestas.
Que tú también querías esto.
O sentías esto.

Sentías...

Por desgracia, para mí sigue siendo un siento.

Te lo estoy diciendo

"Qué casualidad fue encontrarte justo acá,
yo tan puesto, vos tan apuesta.
Qué sofisticado fue invitarte a coquetear,
yo tan lento, vos tan regia.
Sos hermosa, sos hermosa.
Qué barbaridad haber tenido que esperar para vernos de tan cerca,
desnudémonos y no digamos nada más.
En silencio tus caricias,
son hermosas, son hermosas.
Y el mundo sonríe conmigo.
Todo lo que pueda arreglar hoy, lo dejaré para mañana,
todo lo que pueda arreglar hoy, lo dejaré para mañana.
Qué casualidad fue encontrarte justo acá,
yo tan puesto, vos tan apuesta.
Qué atrevido fui al iniciarte en la verdad,
yo radiante, vos tan dispuesta.
Soy hermoso, soy hermoso, soy hermoso, soy hermoso.
Y el mundo sonríe conmigo.
Todo lo que pueda arreglar hoy, lo dejaré para mañana,
todo lo que pueda arreglar hoy, lo dejaré para mañana.
Todo lo que pueda arreglar hoy, lo dejaré para mañana,
todo lo que pueda arreglar hoy, lo dejaré para mañana."
(Puesto - Babasónicos).

Oh, mira.
Están los dos.
Su penosa situación narrada.
Sus actitudes.
Una arrastrada y la otra insensata.
Qué pena.
Verte a ti ("Qué barbaridad haber tenido que esperar para vernos de tan cerca..."), tan entregado, tan dispuesto a lo que sea, tan consciente del daño que te estás provocando y de lo poco que a ella le importa; y así, tan incapaz de hacer algo para evitarlo.
Y por otro lado.
Tú.
("Todo lo que pueda arreglar hoy, lo dejaré para mañana...")
Tan indiferente.
Tan abusadora, tan poco preocupada, sólo de ti y tus efímeros intereses.
Sabiendo lo mucho que lo haces sufrir a él, a él y a él (sabes que con cada "él" me refiero a una persona distinta).
Y aún así, incapaz de medirte, de controlarte, de pensar en los demás.

Date cuenta que para tu propio bien, necesitas el de los demás, y el de él, él y él (lo mismo) y que no estás haciendo nada para contribuir.

Y tú, date cuenta de que nada bueno puede salir de eso.
Por favor.
No me gusta decir te lo dije.


No me gusta consolar hechos previstos.

Amor

"AMOR, sentimiento que atrae una persona hacia otra."
(Diccionario Práctico Larousse).

"SENTIMIENTO, acción y efecto de sentir. Estado afectivo del ánimo. Parte afectiva del ser humano, por oposición a la razón."
(Diccionario Práctico Larousse).

"SENTIR, hallarse en un estado."
(Diccionario Práctico Larousse).

"ESTADO, situación en que está una persona (...)."
(Diccionario Práctico Larousse).

"SITUACIÓN, estado o condición de una persona (...)."
(Diccionario Práctico Larousse).

"CONDICIÓN, índole, naturaleza o propiedad de las cosas."
(Diccionario Práctico Larousse).

"ÍNDOLE, condición natural de algo o alguien."
(Diccionario Práctico Larousse).

"NATURAL, intrínseco a la naturaleza de un ser. No forzado. Manera de ser."
(Diccionario Práctico Larousse).

"INTRÍNSECO, que es propio de algo por sí mismo."
(Diccionario Práctico Larousse).

"PROPIO, que pertenece en propiedad a una persona. Característico."
(Diccionario Práctico Larousse).


¿Así de simple?
El Amor, eso que es considerado tan importante, tan infaltable, tan agotador, tan maldito, tan culposo, tan llenador, tan absorbente, tan necesario.
Y, ¿así de simple?

O sea, alguien que no siente amor, por definición, dejaría de ser una persona, dejaría de ser alguien.

El Amor es algo intrínseco.
No creo.
Más bien creo que éste es ajeno a la persona en sí, sólo que persona sin amor, no es persona.
Es definitivamente necesario.
Es característico.

Algo tan hermoso, tan puro, tan necesario...
Y, ¿tan hiriente?
No.
Los malos, no correspondidos y superficiales usos del Amor llevan a herir.
Pero no, jamás hiriente.

Entonces, sí, es ajeno a la persona.
Pero necesario para serlo.

Conocido desde la gestación, se convierte en algo indispensable para ser persona y para vivir, para convivir.

Muchas veces no deseado, despreciado.
No.
No es el Amor, son sus malos usos o concepciones.


Yo lo llamaría, inefable.

"INEFABLE, que no se puede expresar con palabras."
(Diccionario Práctico Larousse).



Y en el fondo, todos sabemos lo que es.

Hiéreme

"If it makes you happy,
it can't be that bad.
If it makes you happy,
then why the hell are you so sad?"
(If it makes you happy - Sheryl Crow)

Si algo te hace "feliz", no reparas en buscar criterios para ver si ese algo es bueno o malo, eso no importa, sólo importa cómo te haga sentir.
Pero, también puede hacerte feliz, y herirte al mismo tiempo; sí puede ser malo.
Estás cegado completamente a pensar en eso.
Es mucho más bonita la sensación.
Aunque, en el fondo, sabes muy bien el daño que te está haciendo.
Y nunca, nunca...
Será como quieres.

Pobre

Já.
¿Que ya se me va a pasar?
¿Que ya me voy a dar cuenta del mal trato?
¿Que ya les voy a pedir perdón?
Já.
Yo creo que algún día tú vas a madurar.
Tú vas a asumir.
Tú vas a hacerte responsable.
Y tú vas a darte cuenta de que no todo lo que haces está bien.

Qué real paja tú.
Tú y tu complejo de santa.
Tú y tu insatisfacción.
Tú y tu inagotable exigencia.

Tú y tu descarada indiferencia.

Inconsciente

No te das cuenta del poder que tienes sobre mí.
Inconsciente.
Me basta con verte, con oírte, con pensarte.
Ni un movimiento, ni un sonido, ni un respiro.
Tan solo un pensamiento tuyo me lleva muy lejos de mis acostumbradas y comunes vivencias.
Inconsciente.
Eres capaz de lo quieras conmigo.
No tienes conciencia.
Una irreal y simple imagen tuya me llena, me sobrepasa.
Inconsciente.
Me haces ver un mundo que no es.
Tener los pensamientos más impensados que jamás pensé tener.
Y me encanta.
Pero por favor, date cuenta; toma conciencia.


"Concédeme dejar de soñar."

Dímelo tú

Volví a soñar contigo.
Pero, ¿sabes qué soñé esta vez?
Te importaba.
Yo y el resto del mundo te importaban.
Me preguntabas qué era lo que pasaba con nosotros.
Por qué ya no eramos lo de antes.
Por qué las cosas habían cambiado tanto.

¿Me lo puedes responder tú?
O mejor dicho, ¿te percataste siquiera de que es así?
No.
No te importa.
Nada.

What then?

"What if you slept? And what if, in your sleep, you dreamed? And what if, in your dream, you went to heaven and there plucked a rare and beautiful flower? And what if, when you awoke, you had the flower in your hand? Ah, what then?"

"¿Y si durmieras? ¿Y si en tu sueño, soñaras? ¿Y si soñaras que ibas al cielo y allí recogías una extraña y hermosa flor? ¿Y si cuando despertaras tuvieras la flor en tu mano? ¿Ah, entonces qué?"
(Coleridge)


Entonces...
Entonces me creería loca.
Pero más allá de eso, no mucho.
Cosas así de "imposibles" se vuelven impenetrables a los hechos que ocurran, o por lo menos en mi caso, se vuelven inaceptables.

Así mismo no quiero aceptarlo.
Aunque sea mucho más factible y razonable, y es más; previsto.
No quiero aceptarlo.
No pienso aceptarlo.

Inconscientemente llegaste demasiado adentro como para irte así sin más.
Sin reparar en mí.
En ti.
Y en esto.

Mucho más

"Alicia va en el coche, carolín.
Alicia va en el coche, carolín,
a ver a su papá carolín cacao leo lao.
A ver a su papá carolín cacao leo lao.

Que lindo pelo lleva, carolín.
Que lindo pelo lleva, carolín,
¿Quién se lo peinará? Carolín cacao leo lao.
¿Quién se lo peinará? Carolín cacao leo lao.

Lo peinará su tía, carolín.
Lo peinará su tía, carolín,
con peine de cristal carolín cacao leo lao.
Con peine de cristal carolín cacao leo lao.

Alicia ya se ha muerto, carolín.
Alicia ya se ha muerto, carolín,
la llevan a enterrar carolín cacao leo lao.
La llevan a enterrar carolín cacao leo lao."


Mucho más impactante es darte cuenta de ciertas cosas después de tanto tiempo.

¿De nuevo?

Leí mi blog desde lo primero que escribí.

Todo.

Al principio me dedicaba a escribir críticas a la sociedad, cómo encontraba que todo está mal, pero que no se puede hacer nada al respecto.

Brígido como afectó las cosas que me acontecieron.

Las críticas a una masa ya no me interesaban por decirlo así.
Me dediqué a hacerlo con las situaciones específicas, pero perdí notoriamente esa frialdad de mente y decisión con la que solía decir las cosas; me fui por las pseudo-cartas a ciertas personas, que claramente iban dirigidas a éstas, pero nunca especifiqué. Hablaba de la cosas que habían pasado, opinaba, mostraba qué tanto y cómo me afectaban, pero nunca las puntualicé.

Creo que dejé de ver las situaciones desde a fuera.

Sigo creyendo que todo es una mierda, y que a veces hay momentos lindos.

Espero volver a lo de antes, me sentía más fuerte.


Un pequeño intento...

Al maricón conchasumadre...
TE ODIO.
Me repugnas.
Los pensamientos más sádicos que jamás había tenido, los tengo hacia ti.
Te deseo lo peor.

A la mosquita muerta...
Já.
Decídete.
No puedes tener todo.
Y si lo quieres todo; qué pena tu vida, conmigo no cuentas.

A la ciega incondicional...
Gracias por estar siempre ahí.
Y sé que las cosas que me dolieron por parte tuya jamás las intencionaste.

A los extras...Díganme las hueás a la cara.
Si se atreven.
Saben perfectamente el miedo que tienen a entablar una conversación al respecto conmigo.
¿Será así sólo por decirlo... porque tengo razón?


Qué relajante.
Si alguien se siente identificado con alguna de las anteriores clasificaciones y cree que no soy capaz de decirlo a la cara, verifique conmigo la información y no tengo problema en tirarle todos los garabatos que me sé en la carita, y saben perfectamente que si eso no lo hago de una es porque prefiero ahorrarles (sí, a ustedes) el mal rato.


Atentamente

Vieja Chubi

Púdrete

Volviendo a las críticas...

Hay gente tan cara de raja.
Ése es el término justo.
Gente que no se conforma con nada.
Que pide de todo.
Que no da nada.
Que se pasa por la raja a las demás personas.
Que sólo le interesan sus beneficios.
Y que se andan haciendo de mosquitas muertas.

Que real paja ustedes.
Pero filo, hay gente a la que le puede afectar encontrarse con personas así.
Yo... ya no te la aguanto.
Te mando harto ratito a la chucha.

Se van

Te los quitan.
Una, una ha estado siempre.
Y pensé que lo iba a estar para siempre.
Y ya no es así.

El otro, el otro está hace poco.
y en poco, ha logrado mucho.
Y ya no será así.


Pero, me es muy díficil comenzar a extrañar cuando aún están aquí.
El sufrimiento tendrá que esperar a que ya no estén.
Y arrepentirme de no aprovecharlos cuando sí pude.

Jamás

Demasiado tiempo.
Y aún no lo asimilo.
Ya me acostumbré.
Pero aún no me entra en la cabeza que sea así.
Ni por qué.
Aunque ya ha pasado mucho tiempo como para seguir con cuestionamientos.
Pero aún no lo quiero.

Aún no.
Jamás.
Me encanta recordarte.

Hazlo Bien; Exígete

"Puedes obtener la felicidad a costa de los demás."

Claro, mucha gente te puede hacer feliz.
Puedes llegar a querer tanto a las demás personas, que éstas tan solo siendo ellas mismas pueden animarte, distraerte, llenarte.

Pero llega a ser distinto cuando necesitas que los demás hagan ciertas cosas, cuando ya no basta con que sean ellos mismos, y que te pones a prácticamente exigir para poder satisfacerte.
Eso, aunque los demás te den en el gusto, no logrará llenarte como lo otro, es algo mucho menos puro, mucha más elaborado, exigido, forzado y complacido.
No es agradable hacer sentir a las demás personas que tienen que hacer ciertas cosas o si no, no te sirven.


Pero tampoco es muy agradable que te lo exijan.
Para nada.

"No agradezcas a los demás por hacer bien su trabajo.
Asegúrate de hacer bien el tuyo."

No seré nada, lo seré todo

Una Palabra
(Carlos Varela)

Una palabra no dice nada,
y al mismo tiempo lo esconde todo.
Igual que el viento esconde el agua,
como las flores que esconden lodo.

Una mirada no dice nada,
y al mismo tiempo lo dice todo.
Como la lluvia sobre tu cara,
o el viejo mapa de algún tesoro.

Como la lluvia sobre tu cara,
o el viejo mapa de algún tesoro

Una verdad no dice nada,
y al mismo tiempo lo esconde todo.
Como una hoguera que no se apaga.
Como una piedra que nace polvo.

Si un día me faltas no seré nada,
y al mismo tiempo lo seré todo;
porque en tus ojos están mis alas,
y está la orilla donde me ahogo.

Porque en tus ojos están mis alas,
y está la orilla donde me ahogo.


Adoro con toda mi alma y corazón esta canción.
Por algo la pongo, no suelo hacerlo.

Egoísmo

No es que quiera.
No es que me guste.
No es que me sienta bien así.
Es que no lo puedo controlar.

Claramente no me gusta tomar una postura tan egoísta frente a la situación.
El problema es que no sé si es tan egoísta como se puede ver a simple y superficial vista.
No creo que sea un egoísmo tan malo.
No es que quiera pensar sólo en mí, en lo mejor para mi, en lo que yo quiero y te deje a ti completamente de lado.
En el último tiempo no he hecho más que preocuparme por ti, estar contigo, acompañarte, apoyarte y actuar según tu bienestar lo requiera.

De verdad no creo que esté tan mal así.
Sé que tengo que pensar en ti, nuevamente, y en lo que tú quieres.
También sé que el asunto no me concierne para nada.
Pero no creo que esté pensando mal.
El egoísmo no es algo bueno, pero no siempre es planeado, pensado, ni premeditado. Puedo decir que a veces ni siquiera es bien recibido por las personas que lo sienten.


Lo siento.
Pero no puedo evitar que me duela.

Adolescencia

Lo bueno: Que te sientes totalmente libre y capaz de hacer lo que quieras; el mundo es tuyo y para ti.
Lo malo: Darte cuenta de que no es así.

Actividad que nos dio la miss en Orientación; escribir el aspecto bueno y el malo de ser adolescente.

Como la mayoría de los viejos dicen, aunque yo no he vivido más que esto, sí considero que la adolescencia la mejor (o una de las mejores dada la ignorancia que tengo respecto a las demás) etapa de la vida.
¿Por qué?
Porque tienes ganas de hacer lo que se te pase por la cabeza.
Porque quieres llevar la contra.
Porque quieres hacer lo que hacen los demás.
Porque sientes deseos de ser tú.
Ése tú que no sabes quién es.

Yo creo que uno hace o pretende hacer de todo para ver qué es lo que le viene.
Qué es lo que le acomoda.
Qué es lo que lo identifica.

Esa incertidumbre es lo que motiva la sensación de probar todo, de hacer todo.
De creer que se puede hacer todo.
Y así es, uno cree que es completamente capaz de hacer lo que quiera, que no necesita ayuda, y que cada cosa que sale de su boca es lo más sensato y racional que se puede decir.
No existen equivocaciones, gracias a la sensación de libertad.
Sólo existen estorbos.
Estorbos para lograr lo que se considera necesario.
Y que es necesario.
Todo a ojos de nosotros mismos está bien.
Está bien porque no hay equivocaciones.
Sólo hay estorbos que se encargan de demostrar que no es así.

Se para siempre

Nada es para siempre.
Porque nada es para siempre.
¿Por qué?
¿Por qué no puede haber algo que dure eternamente?
¿Algo para siempre?
Claro, físicamente hablando nadie vive eternamente, por lo que en algún momento lo que tenemos, sentimos, vivimos se tiene que acabar.
Pero, yendo más allá.
¿Por qué todo termina antes de que nosotros lo hagamos?
¿Por qué todo llega a su fin sin que nosotros lo queramos?

Quizá nunca fueron parte de ti.
Quizá nunca lo hubiesen sido.
No es por restarles importancia, pero quizá nunca fueron cosas para estar para siempre.

Algo que realmente se une contigo, que realmente logró llenarte, y que vale la pena seguir haciéndolo; seguirá contigo hasta tu siempre.
Y a pesar de que no siempre te traiga alegrías, siempre te seguirá llenando.


Quédate.

Porque me importas

Porque me quieres.
Porque me conoces.
Porque no me juzgas.
Porque me aceptas.
Porque te importo.
Porque te quiero.
Porque te conozco.
Porque me importas.
Porque lo haces bien.
Porque lo haces mal.
Porque no piensas.
Porque te equivocas.
Porque no me importan tus errores.
Porque tú me demostraste la máxima entrega, el máximo apoyo, la máxima incondicionalidad.
Siempre.
Siempre ahí.
Conociéndome, importándote.

No me importa.
No me importa lo que hagas.
No me importa cómo lo hagas.
No me importa por qué lo hagas.
Me importas tú.

Por eso te doy mi máxima entrega, mi máximo apoyo, mi máxima incondicionalidad.


Porque me importas.

Ni en broma

Te afecta.
Te afecta mucho anímica y emocionalmente.
Te afecta demasiado lo que te digan las demás personas.
Independiente de si te importe o no.
Te afecta.

Te hace sentir bien...
O mal.
Mal.
Triste.
Enojado.
Apenado.
Frustrado.
Desesperado.
Mal.
Te afecta.

Eso demuestra la dependencia que tenemos al resto de las personas.
Que realmente sí nos importan.
Y que realmente no todo es un chiste.
Que para ti no son un chiste.
Y que te afecta.

No lo digas.
Ni en broma, por favor

Porque aún me duele

Perdón.
Perdonado.
¿Por qué?
Porque sí.

No.
No me sirve.
Eso de perdonar porque sí, sólo para no estar enojado; no, no me sirve.
Uno no se enoja con un propósito, no se enoja para odiar, no se enoja para sentir ni desear mal.
Enojarse es una reacción prácticamente inconsciente que tenemos cuando por ejemplo, nos hieren.
"A fin de cuentas, no importa el daño hecho, sino el dolor sufrido."
O sea, uno no se enoja porque le hicieron algo, uno se enoja porque ése algo le afectó.
Por lo tanto, uno no decide cuándo se le pasa el enojo, uno no decide cuándo perdonar.
Desgraciadamente, como casi todo, es cosa de tiempo.
Para perdonar se necesita que pase el tiempo, ya que al pasar éste, uno va "olvidando", va restándole importancia al hecho ocurrido, va olvidando el dolor sufrido, y todo va volviando a su curso "normal".

Perdón.
No.
¿Por qué?
Porque aún no se me olvida, porque aún me duele.

Cansada

Te cansas de hacer las cosas de la manera en la que las estás haciendo, de los por qué, de los resultados, de los cargos de conciencia.
Uno no siempre aprende de los errores.
Los comete, los detecta, los analiza, los asume, los sufre.
Pero tan fácil no volver a cometerlos, no es.
Es más fácil "olvidarlos".
Olvidar todo el remordimiento de los errores previos.
Y vivir la emoción de un segundo.
Y después, vuelves a sentirte mal.
Y peor aún.
Te empiezas a calificar de imbécil retardado que no tiene mente.
Un imbécil retardado en carencia de autocontrol que no es capaz de recordar, de aprender.
Y te cansas.
Te desprecias.
Te desprecias porque no sabes cómo una persona actuando de una simple manera es capaz de llevarte a ti a cometer grandes errores.
Grandes errores que son culpa tuya.
Pero no.
Tratas de buscarle una decimosexta pata al gato y cargarle la culpa alguien más.
Pero al fin y al cabo.
Tú eres completamente capaz de decidir qué hacer y qué no hacer.
¿O no?
Bueno, no siempre.
"Gracias a la pasión la gente hace cosas excepcionales."
Y no es sólo una pasión carnal.
Es la pasión que uno tiene en las cosas.
Se convierte en el anhelo.
O en algo completamente momentáneo.
Que quieres hacer.
Pero sabes que está mal.
Y aún así...
Lo hago.

Miente, no me mientas

Siempre es mejor decir la verdad.
No, gracias.

Siempre es mejor recibir la verdad.
No, gracias.

La verdad no siempre es lo que uno quiere.
Uno tiene una ilusa visión de que la verdad es lo que uno quiere y necesita; lo que a uno le gustaría que fuera.
La verdad, que vendría a ser la realidad, no está construida sólo por nosotros ni tampoco es sólo para nosotros, una realidad es válida para una persona tanto como para las demás. Entonces, una persona puede hacer realidad tu verdad añorada.
Pero tampoco se puede vivir esperando obtener lo que uno quiere.
Hay que vivir queriendo y aprendiendo a querer lo que ya se tiene.

Aunque, los deseos, siempre existirán.
Y son éstos las grandes motivaciones que tenemos.
Porque uno siempre quiere más.
Uno siempre necesita más.
Al obtener algo deseado, éste ya pierde el brillo.
Y vamos en busca de algo más.
Que tan necesario no es.
Lo que sí hace falta es esa sensación de intriga, de ansiedad, de búsqueda, de vacío.

No estamos acostumbrados a estar completos.
Siempre querremos más.

De verdad

Y necesitas vivir momentos desagradables, molestos, tristes; para darte cuenta quiénes son los de verdad.
En los momentos agradables, simpáticos, alegres; hay muchos, y crees que todos los presentes son de verdad.
Los momentos desagradables, molestos y tristes; más desagradables, molestos y tristes se vuelven al darte cuenta de que no todos eran de verdad, de que no todos iban a estar siempre contigo, de que no todos tenían la misma importancia aunque en algún momento pensaste que sí, de que no los conocías a todos tan bien como creías, de que quizá tú tampoco les importabas a ellos, de que quizá todo siempre fue un juego superficial, de que no estabas viviendo con la importancia debida a las cosas, de que veías sólo lo que tú querías ver.

Desagradables, molestos, tristes.
Pero aprendes a valorar mucho más a los que sí son de verdad.
Los que pase lo que pase nunca te darían la espalda.
Los que dejarían todo para acompañarte.
Los que realmente se preocupan por ti.
Los que tratan de subirte el ánimo.
Los que de verdad te conocen.
A los que de verdad les importaste, les importas, y les importarás.

Ahí estuvieron antes, ahí están ahora y ahí estarán siempre.
Porque aunque no te comprendan, sí te entienden.
Sí te quieren.

Y los que no.
Los que eran una simple apariencia.
¿Podrían alguna vez haberse convertido en uno de verdad?
No creo.
Porque por algo no estuvieron contigo ni en lo desagradable, ni en lo molesto ni en lo triste.

Los que no.
Ya se olvidarán...



"Haciendo de nuevo amistades viejas..."

Víctima

Víctima, víctima, víctima.
¿Te consideras la única?
Créeme que más gente de la que crees ha salido herida de esto.
Tú siempre pensaste que todo lo malo que uno hace en la vida en algún momento se devuelve.
Y después te preguntaste por qué te pasaba esto a ti si tú eras una persona buena.
Bueno, quizá porque en estos momentos no estás en el papel de víctima, o por lo menos no víctima de los demás.
Pero sí víctima de ti misma.
Obligada, como todo el mundo, a convivir con las consecuencias de sus decisiones y acciones.
Así que no te quejes tanto.
En este mundo no hay alguien que esté libre de maldad o malas intenciones por dentro.
A todos les gusta la venganza, la vergüenza ajena y cosas por el estilo.
Así que date cuenta que no eres una santa paloma.
Y que por algo esto te está pasando.
Por alguien.



"Llora sola."

No Está

A ojitos cerrados va,
a boquita cerrada acata,
a orejitas tapadas asiente,
a manitos amarradas hace,
a piececitos atrapados corre.
Con alma encerrada confía.

De cuerpecito se lamenta;
cerrada, acata;
tapada, asiente;
amarrada, hace;
atrapada, corre.

En alma sufre;
encerrada, confía.

Confiando, sufriendo.
Los ojitos ya no ven a nadie,
la boquita no le habla a nadie,
las orejitas no oyen a nadie,
las manitos no abrazan a nadie,
los piececitos no corren a nadie.
Su alma ya no siente a nadie.
Su alma ya no se siente.

Después de la Tormenta Sale el Sol...

"Después de la tormenta sale el sol..."
(Manes del Asis)

Una canción, muy conocida, que a mucha gente le gusta.
Bueno... Sí, es una muy linda analogía la que usaron.
Esta parte se puede interpretar como que a pesar de los problemas por los que uno esté pasando, los que vendrían a ser la tormenta, siempre las cosas van a pasar, y todo se va a arreglar, lo que vendría a ser la salida del sol.

Y sí, es verdad, si uno se pone a pensar en todos los problemas que uno ha tenido en su vida, en los de los amigos, los de la familia, hasta los del vecino; los problemas siempre se superan.
Pero, ¿Y los daños de la tormenta?
Uno tormenta puede arrasar con millones de cosas; casas, árboles, animales, emociones, sentimientos, relaciones, personas.
Y sí, después de un tiempo, las cosas se van a arreglar, pero eso no quiere decir que van a ser como antes y tampoco mejores.
La tormenta pasa, el sol sale, pero este sol sale a un nuevo mundo, a una nueva realidad, una realidad que tuvo que adaptarse a los cambios y desastres que provocó la tormenta, y sí, de todas maneras el sol sale, pero sale alumbrando cada vez más, ya que con el paso del tiempo uno se va acostumbrando a vivir de una nueva manera, a vivir con los problemas, a aceptarlos, a superarlos.
Pero no a olvidarlos.
Los daños de la tormenta siguen ahí, un simplecito sol no es capaz de recontruir casas, revivir animales, plantar nuevos árboles, consolar personas, borrar sentimientos.

El tiempo no arregla todo, hay que actuar, pensando, correctamente.



Vivir un tormenta, es horrible.
Esperar la salida del sol, aterrador.

Cinismo

Gente cínica.
Todo el mundo es cínico.
Es inevitable.
A veces, te sientes un cara de raja.
Pero a veces, a veces se siente bien.
Es lindo creer que todo está bien, cuando en realidad no lo está.
Es lindo creer que las cosas ya pasaron y listo, caso cerrado.
Pero la tensión, la tensión sigue ahí.
Porque en el fondo sabes que nada está bien.
Todo mal, mal, mal.
Pero es lindo recordar viejos tiempos.
Pero imitarlos no es lo mismo.
Menos aún cuando en el fondo no lo haces espontáneamente; lo haces porque crees que eso ayudará a sentirse como antes.
Pero no.
El ambiente tan tenso capaz de atravesarlo con un cuchillo sigue ahí.
Y te preguntas, si la demás gente, partícipe de esto, también sentirá lo que tú sientes.
Si es así, es estar jugando a vivir una realidad que no es.
Y si no es así, peor te sientes, porque no te estarías mintiendo sólo a ti, sino que también a ella, que a ojos cerrados sigue confiando.


“La realidad baila sola en la mentira.”

Reacciona

¿Cómo mierda?
¿Cómo mierda alguien puede tener los ojos tan herméticamente cerrados a la realidad?

¿Te digo otra cosa?
Estoy pasando de la pena... A la rabia.
Sí.
Sí hueón.
Sé que tengo que estar lo más pasiva y cabeza gacha que pueda.
Pero no.
¿Quieres que la gente deje de hacerte daño?
Deja de hacerte daño a ti misma.
Empieza a hacerte respetar.
Si no, no vas a lograr nada con las demás personas.
Y de paso...
No sabes como tú, sí tú, por más que te cueste creerlo, le estás haciendo daño a gente que te quiere.
Abre los ojos.
Si no lo haces... Quiero ver en que estado vas a estar en 3 meses más.
Proyéctate con las personas.
Ilusa.




Atina.
Reacciona.
Actúa.
Pero bien.

Para ti

Y esto te lo escribo a ti.
Va para ti.
¿Por qué?
Porque yo lo necesito.
¿Para qué?
Para que me entiendas, no para que me comprendas.
Suponiendo que algo me conoces, me dejo llevar por un viejo dicho, y te digo, que odio arrepentirme de las cosas que hago, creo que no está bien.
¿Te digo otra cosa?
Sí me arrepiento.
Si tuviera la oportunidad de borrar algún hecho en mi vida, sería ese.
¿Por qué?
Si tanto a mí no me afecta, quien en realidad se ve afectada eres tú.
¿Entonces?
Porque como ya he dicho antes acá, para la armonía, paz y felicidad propia, se necesita la ajena. Porque son esas personitas que se meten en tu vida sin avisarte que al momento de entrar, no querrás que se vayan nunca las cuales son tus motivaciones para levantarte todos los días en la mañana, para esforzarte por las cosas, porque es gratificante estar con la gente que uno quiere, porque es hermoso ver la felicidad de alguien ajeno a ti pero que al mismo tiempo es parte de ti, ya que sin esa persona no serías lo que eres hoy, no te gustaría lo que te gusta hoy, no estarías donde estás hoy, no pensarías como piensas hoy, no habrías vivido las experiencias que ya tienes sobre el cuerpo.
Recuerdos.
Son esos momentos que se transforman en recuerdos los cuales hacen apreciar los acontecimientos, y personas en la vida. Ya que aunque éstos no sean placenteros, el hecho de vivirlos junto a gente querida; te llena.
Tú me llenas.
Yo te quiero.
Sí me importas.
Dolida, estoy.
Tanto como tú, no.
Pena, sí.


Perdón.